En una primera instancia, se presentó la investigación realizada por parte de la comuna a cargo de la Dra. María Clara Rubio, especialista del IADIZA-CONICET. En la misma se destacó la localización de los valores de conservación vinculados a la presencia de ecosistemas de gran importancia ambiental, conformados por bosquecillos de chacay y ambientes de vegas de la cuenca del río Blanco y zonas aledañas. El relevamiento fotogramétrico con drones fue realizado conjuntamente con el estudio García Betancourt. Posteriormente, y gracias a la presencia y aportes de investigadores, guardaparques, técnicos y vecinos de la comunidad, se logró enriquecer colectivamente el inventario en aspectos paleontológicos, sitios de anidación de aves y otros ambientes de interés particular. Se contribuyó así a la generación de conocimientos útiles para la toma de decisiones y la gestión del espacio protegido en el marco de un modelo sustentable de desarrollo. Las finalidades y alcances del trabajo realizado -validado por la comunidad local y por especialistas -, presentan impactos positivos a diversas escalas. Se destaca su aporte al Plan de Manejo del Área Ambiental Potrerillos y al Plan Municipal de Ordenamiento Territorial. Del mismo modo, contribuye a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ONU), al Inventario Nacional de Humedales, a la actualización del Mapa de Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos de la provincia de Mendoza y al establecimiento de las prioridades de conservación de acuerdo a lo dispuesto por la Ley de Ordenamiento Territorial y Usos del Suelo de la provincia de Mendoza, en consonancia con los postulados de las Leyes Nº 25675 y Nº 5961. De esta manera, Luján se convierte en el primer departamento de la Provincia en encarar una tarea de este tipo, que claramente traza una línea estratégica para la conservación de sitios de alto valor ambiental en sus zonas montañosas, proveedoras del vital recurso hídrico y cuna de una importante diversidad biológica y cultural.