Este cambio es casi natural, hoy los generación Y más viejos deben extraer entre los 37 y 38 años, son maduros, muchos de ellos con familia y estabilidad profesional y laboral. Se estima que este grupo poblacional en conjunto tiene un potencial de consumo por alrededor de 200 mil millones de dólares, según estimaciones de Forbes. Pero, a la par que los millennial crecen, también cambian sus hábitos de consumo, al paso que con el tiempo, la siguiente generación comienza a ganar cada vez mayor protagonismo. Sí, los centennials, ese grupo poblacional donde los mayores deben tener no más de 23 años, están por incorporarse al mundo laboral, pero también de adquirir un gran potencial económico, según datos de Bloomberg ya es cercano a los 143 mil millones de dólares, sólo en Estados Unidos. Ya son varias las marcas que han visto en estos jóvenes un público objetivo interesante: Samsung, Reebok, y Sprint, entre otras han lanzado campañas diseñadas especialmente para ellos. Pero, así como ganan relevancia, también comienzan a cambiar las reglas del juego, en especial en términos de marketing y publicidad. Aquí algunos datos que nos ayudarán a entender el por qué: Según diversas fuentes, las marcas tienen más reducida la ventana para poder conectar con esta generación, ya que sólo cuentan con ocho segundos. Mucho se debe a que son consumidores nativos digitales que, aunque puede decirse lo mismo de los millennials, la diferencia está en cómo la usan, la conocen y viven con (o dentro de) ella. Por ejemplo, una reciente consulta de Mediablaze encontró que para los jóvenes de la generación Z prefiere las plataformas visuales (y no son fans de leer): la apps que más usan es Snapchat, seguida de Instagram, Twitter y Facebook. A diferencia de otras generaciones, estos usuarios usan las redes sociales para eso: socializar con amigos y familiares. Para ellos es importante estar al tanto de lo que sucede. Según el reporte, esa es una de las razones por las que prefieren a Snapchat, por su capacidad de proporcionar actualizaciones de la vida en tiempo real. Esto podría ser un imán para las marcas, pero antes que se desboquen deben saber algo. No les interesan las marcas, o la publicidad. Si los generación Z siguen a una marca en redes sociales, no es por su publicidad o productos, sino porque sus contenidos responden directamente a sus intereses y valores. En el mundo offline no es muy distinto, según datos de Barclays, para el 81 por ciento de esta generación, es suficiente encontrar un producto o servicio con mejor precio o calidad superior para tomar una decisión de compra. Fuente www.merca20.com