Un nuevo jardín   Ay de mí si muriera la esperanza. Ay de mí sin sueños para asir. Nos pesa el dolor de la partida, Pero el corazón se anima a seguir.   Nos habita el pesar y la tristeza, Pero hay puertas aún por descubrir, Dónde viven aquellas ilusiones, Que siembran de nuevo el jardín.   Ay de mí si dejara de intentarlo, Y en el lodo muriera mi sentir, Ay de mí si renunciara a todo, Y el miedo celebrara un festín.   Valiente no es aquel que nunca muere, Valiente es el fénix de la historia, Que junta sus cenizas, Y vuelve a resurgir.   Ay de mí, si abdico a la batalla, Ay de mí, si la espada dejo ir. Ay de mí, si sepulto aquellos sueños, Y el volar no sea de aprendiz.   La guerra atormenta ideas, Agota no ver un porvenir, Se huele la indiferencia, Hay ríos de bronca y frenesí.   Ay de mí si bajara la guardia, Y dejara al odio resurgir, Ay de mí, si ya no siento nada, Y me baste tan sólo con morir.   Brota sangre en mis venas, Brotan letras ansiosas por latir, Brota un mar turbulento de ilusiones, Brota un cielo que no me deja ir.    Sonia Brocchetto